Primero yo, después la familia, luego el mundo...

Un precioso cuento que inspira a  Alejandro Jodorowsky  y que nos inspira a la mayoría de nosotros...Pura belleza...Un regalo de Xavier Mendoza  para Plano Creativo que hoy me ha apetecido recordar...
Por cierto que la montaña que hay que empezar a mover no es una lejana como el Kilimanajaro...¡Qué va!
Es algo mucho más cercano ...la montaña de nuestros propios escombros y pensamientos, sentimientos, deseos y necesidades viejos que ya solo nos estorban, nos sobran y nos impiden crecer.

La transformación lleva este orden:

Primero yo, después la familia,luego el mundo...Casi todos quieren...Primero el mundo, después la familia, luego yo.
Así nos luce el pelo...
¡¡¡A por nuestra montaña!!!

(Y que nadie se olvide de la cucharita , oiga.
Pues eso)